El oro ha sido tradicionalmente, el metal precioso que mayor cantidad de inversores atraía. Sin embargo, en el último tiempo, su hermana menor, la plata está llamando la atención de los inversores.

Al igual que como viene ocurriendo con el oro, en los movimientos que puedan observarse en el precio de la plata, China desarrolla un papel fundamental. Las inversiones que el gigante asiático ha efectuado en oro, han marcado el comportamiento del precio del metal precioso en 2020. En este momento, las inversiones que China efectúa en la plata, han impulsado su precio.
El fuerte déficit de EE.UU., los tipos de interés en niveles mínimos y la pugna del dólar por recuperar posiciones, ha hecho que China busque desesperadamente la diversificación de su cartera. De esta forma, la plata se ha presentado como una buena alternativa. A tal punto, los chinos así lo consideran, que un canal de televisión hasta ha lanzado una fuerte campaña publicitaria para incentivar a la población de que invierta en plata.
El motivo fundamental, por el cual, se incentiva la compra de la plata, es que la misma constituye una inversión mucho más barata y accesible que la compra de oro. Asimismo, al ser un mercado mucho más reducido, de menores movimientos y volumen, el impacto de las compras masivas por parte de los inversores, tienen un efecto sobre el precio mucho mayor que en el caso del oro.
Dado que la plata ha mostrado una revalorización de más del 300% desde el año 2000, los inversores se están volcando a este mercado con rapidez, situación que ha provocado que el precio de la plata se sitúe alcista en todos los plazos.